Hoy queremos traeros una pregunta que se hacen muchas personas y especialmente mujeres cuando experimentan subidas o bajadas de peso y ven que sus zapatos ya no les sientan igual. Los pies pueden perfectamente bajar o subir de número si sufrimos una pérdida o una ganancia de peso. Ahora bien, vamos a explicar por qué sucede esto y como afecta nuestro peso a la morfología de los pies.
Los pies también adelgazan
Los pies como cualquier parte del cuerpo pueden verse alterados por cambios en la alimentación, estrés, calzado inadecuado, falta de transpiración, infecciones…
En cuanto a la alimentación y el estilo de vida, una reducción de peso puede suponer un decremento del número de pie que utilizamos habitualmente. Es algo normal en personas que sufren sobrepeso y en pocas semanas o meses se quitan esos kilos, notando como sus zapatos ahora le quedan grandes o sueltos.
Curiosamente los pies no son una zona propensa a acumular tejido graso, es muy raro debido a su estructura. Sin embargo, sí que son propensos a retener líquidos, algo muy común en personas con sobrepeso. Naturalmente, una persona que padezca un sobrepeso importante llegará con el tiempo a acumular grasa en los pies, en cambio si simplemente tenemos un exceso de varios kilos, lo más significativo a la hora de aumentar o disminuir el número del pie, es la retención de líquidos.
El adelgazamiento conlleva también la eliminación de líquidos, que, por malos hábitos como el tabaquismo, el sedentarismo, ropa apretada, abuso de sal, carencia de potasio, pobre salud capilar, baja ingesta de flavonoides… Suelen quedarse en los pies.
¿Cuántos números puedo perder si bajo o subo de peso?
Depende mucho de los kilos que se pierdan, tu altura y constitución. Normalmente se gana un número de pie por cada 10 o 12 kilos ganados de peso. En volumen ojo, pues una vez que finalice el crecimiento óseo del pie, sobre los 16-17 años en mujeres, el hueso no crece más. El número de pie sube por acumulación de líquidos, o bien por acumulación de tejido graso. El pie se hace más grueso y el zapato en volumen no se amolda. Ahora bien, esto es muy relativo, porque si es una ganancia positiva provocada por un aumento de masa muscular, tal vez no experimentes un incremento en el número de pie, o si eres una mujer muy alta.
Por tanto, a la hora de elegir zapato y sobre todo número, considera si tienes pensado hacer un cambio de hábitos en tu alimentación o estilo de vida, pues tal vez en unos meses el calzado ya no sea adecuado para tus pies.
Cualquier duda en comentarios. Chao!
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