Aunque no puedo darte una causa única de por qué puede salirte una fascitis plantar, si que quiero que entiendas que en algún momento de tu vida tengas que lidiar con este problemilla.

La fascitis plantar es bastante molesta si no cuidas el pie, llevándote incluso a un mal reparto del peso de tu cuerpo para evitar dolor en la planta del pie. En el caso más grave el dolor puede impedir la marcha.

fascitis plantar

¿Qué tienen que ver los zapatos con la fascitis plantar?

La fascitis plantar viene originada por una inflamación en la aponeurosis del pie. Esta aponeurosis es una fascia de fibras musculares, como si fuese una malla conjunta y compacta. Le da soporte y defensa al hueso para soportar cargas, golpes o elongaciones.

Se origina por pequeños microtraumatismos en ella, por caminar mal, por exceso de impactos o incluso por estrés. Con el tiempo, la inflamación se cronifica y aumenta de tamaño, generando presión en los nervios, causando dolor al caminar. Algunos expertos sugieren que el espolón del calcáneo, del que ya hablamos en otro artículo, puede estar involucrado en la patogénesis de la fascitis plantar. Lo cierto, es que anatómicamente, podemos contemplar que la aponeurosis de la fascia plantar, se origina por encima del calcáneo. No supone una prolongación y se podría descartar la idea. Tal vez algunos procesos de calcificación interósea puedan beneficiar que el espolón se manifieste abruptamente. En realidad puede complicar la fascitis plantar si lo tenemos, hay que considerarlo.

Algunos tipos de calzado, como botas de trabajo, zapatillas de mala calidad o sandalias con suelas endebles, favorecen el problema.

Es cierto que los zapatos pueden fomentar o atenuar la fascitis plantar. Generalmente no son un desencadenante primario, sin embargo, conocer bien el tipo de calzado que más te conviene puede aliviar el progreso positivo de esta patología.

Para mejorar los patrones de movimiento y los estadios de dolor recomiendo lo siguiente:

  • Mientras estemos en fase aguda de dolor o el médico nos haya alertado de que existe una inflamación de la fascia, es muy importante evitar el uso de tacones muy altos y calzado que fomente en demasía el puente del pie.
  • Los zapatos totalmente planos no son convenientes. Puede resultar una contrariedad comparada con la anterior afirmación. Lo ideal es evitar la hiperflexión y la hiperlaxitud del pie. Ninguna es interesante para mejorar la fascitis plantar. De ahí que los zapatos planos no sean beneficiosos.
  • Generalmente todo el peso y la carga se la lleva el talón, que progresivamente irá transportando e inervando el dolor hacia la zona medial del pie. Sería positivo liberar un poco al talón para compensar el reparto de cargas. Se puede hacer con calzado y mediante ejercicio correctivo.
  • Algunos grupos musculares como los de la zona del sóleo y gastrocnemio están acortados, fomentando una excesiva flexión plantar. Si sufrimos además de problemas lumbares, el cuerpo intentará compensar modificando la estructura del raquis. En ocasiones, el centro de gravedad puede retrasarse para mantener el equilibrio, sobrecargando la musculatura y huesos de la zona ventral posterior. Englobamos aquí a los isquiotibiales, sóleos y el talón.
  • Suministrar una correcta técnica a la marcha. Debemos ser conscientes de caminar correctamente. Personalmente apuesto mucho por el ejercicio correctivo. Contratar los servicios de un especialista durante unas semanas puede ahorrarnos mucho dolor y visitas al traumatólogo y el podólogo.
  • El mejor calzado sería un zapato de tacón bajo, de suela gruesa y resistente. Os dejo alguno de ejemplo abajo para vosotras.

Espero que esta pequeña guía informativa os sea de ayuda, podéis resolver vuestras dudas en comentarios